Las aseguradoras respiran
Tras cinco allanamientos realizados en Buenos Aires, la policía logró detener a tres personas; entre ellos un abogado y dos "rompehuesos". Además secuestraron más de 1000 expedientes judiciales referidos a accidentes de tránsito.
Según informaron fuentes policiales a Online-911, la investigación comenzó a mediados del año 2009, cuando un abogado -hoy detenido- se presentó en los Tribunales Civiles de San Isidro. El letrado, en ese momento, patrocinaba a una mujer que decía haber sufrido un accidente de tránsito, el cual le había provocado importantes lesiones en las extremidades inferiores, por lo que demandaba un resarcimiento económico en perjuicio de una importante y afamada compañía de seguros de nivel internacional.
Tras la investigación, la policía llevó adelante en las últimas horas cinco allanamientos; de los cuales uno fue en un estudio jurídico y el resto en domicilios particulares .
Del resultado de los allanamientos se incautó una camioneta acondicionada de manera tal que simulaba una unidad de traslado médico de pacientes, la que era utilizada por la organización para generar en los lesionados una apariencia de acompañamiento y prestación médico asistencial posterior durante la recuperación de las lesiones deliberadamente producidas.
Según explicó esta mañana el Jefe de la Policía, Juan Carlos Paggi, a las supuestas víctimas, la banda las cazaba en la calle, entre personas carenciadas, y les ofrecían dinero para fingir un accidente automovilístico, en una estrategia macabra que contemplaba, luego de convencidos, llevarlos hasta un inmueble donde se los inyectaba con algún tipo de anestesia y se lo golpeaba en las piernas, hasta quebrarlos.
Una vez realizado el hecho, la supuesta víctima de un accidente era trasladado, quebrado, hasta una esquina del Conurbano bonaerense, donde los esperaba un conductor, al que también habían seducido mediante una paga, que asumía la responsabilidad de haberlo embestido, para que la banda accionara, después, contra el seguro del automovilista.
Según contó el Jefe de la Policía, es por ello que en la mayoría de los casos detectados, nunca aparecía un testigo presencial del accidente, aunque sí gente que veía la escena que se montaba: revuelo de personas, y mucha gente corriendo alrededor de la supuesta víctima del accidente.
"Se presume operaban hace 10 años", añadió el jefe policial y destacó que los detenidos mantenían un alto nivel de vida: "Han tenido propiedades costosísimas, automóviles muy caros y cuentas bancarias que están siendo peritada.